El actor y comediante estadounidense, Owen Wilson, habló del día que se cortó las muñecas y tomó varios somníferos para así acabar con su vida en el 2007.
Ese día su hermano, Luke Wilson, lo encontró en el baño cubierto de sangre, el cual llamó al 911 para su recuperación. Posteriormente, el actor Owen fue internado por un tiempo en una clínica de rehabilitación en Los Ángeles.
Fue después de mucho tiempo que el actor Owen Wilson se sincera y en una entrevista aseguró que su hermano mayor, Andrew Wilson, fue su mayor motor, ya que después de su incidente fue quien se encargó de él.
Además, mencionó que le ayudó mucho el llevar horarios para cada día, lo que le hizo ver que la vida era más fácil y manejable, mejorando poco a poco.